en el centro del amor.
Todo lo da en el acto de saber
que todo le debe ser quitado.
en maltratarte lo gratuito.
para que puedan vivir contigo
las vidas que rondan en los diámetros
que es capaz de trazar tu corazón.
sus consecuencias.
y el asombro han muerto
y evita pasar por donde cohabitan
los ruines de espíritu.
porque tiene el don de desdoblarse
sin dejar de ser entera.
la han vituperado sin poder tocarla.
ha sido quemada y puesta bajo custodia
de los carceleros.
de no necesitar del reposo,
no desfallece ni conoce la fatiga.
deshonrados sus leales oficiantes,
distorsionada hasta el cansancio,
prefiere la ruta del viajero
antes que vivir en los templos
que pudo edificar
por la magnitud de su luz.
entra sin ruido en la casa del hombre,
barre sus rincones,
limpia el polvo más apartado,
repara lo roído
y se encarga de lo roto.
con que se cuenta el tiempo,
la edad y lo pleno
de la conmoción de quienes se reúnen.
Fragua, constancia,
fuelle, criadora.
hay una vergüenza confesa que aspira
a su purificación.
para rehacer su pirámide
antes de que la maleza la oculte.
el sacrificio irracional
y la rajadura
de los bárbaros se cierre.
entre la daga y lo indefenso.
tiene sus surtidores
en el ojo de agua de lo injusto.
te tocó errar como los despatriados forzosos,
cercados y reducidos a la prohibición.
largas filas de hombres serios,
estremecidos hasta la perturbación
por lo que puede provocar
la ignominia.
y la desesperanza.
y construido urnas de cristal.
que naciste para el ensueño y que la vida
poco tiene que ver con tus costumbres.
como joya de escaparte
y te han regalado todos los espejos
para ver en ellos
reflejadas sus conciencias.
Manuel Orestes Nieto.
Panamá, 1951.
Autor de doce poemarios, publica desde 1970.
Recibio en tres ocasiones el Premio Nacional "Ricardo
Miró" de su país (1972, 1983, 1996), con
los libros: Reconstrucción de los Hechos, Panamá
en
la Memoria de los Mares, y El Mar de los Sargazos.
Ganó el Premio Casa de las Américas en 1975 con
su libro Dar la Cara.
Ostenta la Medalla Gabriela Mistral otorgada por el gobierno
de Chile con
motivo del 50 Aniversario del otorgamiento del Premio Nobel a
la escritora
chilena.
Recibe el Premio Nacional de Literatura Pedro Correa en septiembre
del 2000,
por la excelencia literaria del conjunto de su obra poética.
Fue Subdirector General del Instituto Nacional de Cultura, Director
de la
Biblioteca Nacional de Panamá y diplomático. Miembro
del Consejo Editorial del semanario
literario y cultural Tragaluz del diario El Universal.
Es autor, además, de: Rendición de Cuentas,
Noticias de Pájaros, El Cristal entre la Luz, No me permito llorar, Poemas al hombre de
la calle, Este
oscuro lugar del planeta y Entre palabra y palabra.